El sector de la construcción suele llevarse buena parte de la siniestralidad laboral año tras año. El desarrollo de proyectos de construcción es muestra del crecimiento socioeconómico de las regiones pero, desgraciadamente, parece que no se llevan a cabo todas las medidas necesarias para optimizar la seguridad en estos trabajos.

En este artículo traemos una síntesis de un estudio científico recientemente publicado en la prestigiosa revista Safety Science para encontrar los factores que determinan la seguridad en los entornos de construcción. Se revisaron los datos de 30 países de Europa, América, Asia y Australia, compilados tras más de 90 estudios diferentes.

Sigue leyendo para saber más sobre los 13 factores comunes en todos los proyectos de construcción.

Algunos aspectos como el salario, la satisfacción laboral, las recompensas y los castigos o los programas de incentivos influyen en la seguridad en la construcción.

Los incentivos provocan una repetición sucesiva de las actuaciones seguras y otorgan mayor importancia a la seguridad desde el punto de vista individual de cada trabajador. Sin embargo, las penalizaciones pueden dar lugar a miedo y disminuir el compromiso y el estado de ánimo en el trabajo.

Las normas de seguridad son los aspectos que determinan que un trabajo sea realizado de manera segura.

El cumplimiento de estas normas está directamente relacionado con los accidentes laborales y por ello hay que asegurarse de que los trabajadores las conozcan y comprendan adecuadamente.

El cumplimiento de estas normas está directamente relacionado con los accidentes laborales y por ello hay que asegurarse de que los trabajadores las conozcan y comprendan adecuadamente.

Esto incluye la experiencia en seguridad laboral, la formación, los conocimientos y la edad. También incluye el nivel de sensibilización y concienciación en seguridad en el trabajo, y no solo de los trabajadores, sino también de los demás implicados en el proyecto de obra.

Se deben conocer las normas de seguridad, y esto se consigue gracias a las acciones formativas, pero también los trabajadores deben estar concienciados para cumplirlas.

En España, la Fundación Laboral de la Construcción destaca por esta labor de concienciación y formación en el sector.

Esto incluye el presupuesto en seguridad, el coste de los accidentes y el retorno de la inversión (ROI). Periódicamente debe invertirse en el mantenimiento y la renovación de los equipos de protección o en la aplicación de programas de seguridad en general.

Estas medidas pueden ser básicas (es decir, obligatorias por ley) o voluntarias, siendo las medidas voluntarias más efectivas.

En este apartado se incluye el coste del proyecto de obra, su tamaño y calidad, las fallas y reestructuraciones encontradas o los niveles de productividad. Aquí comparten responsabilidades el equipo de Seguridad y Salud y la Dirección.

Generalmente se asume que el nivel de producción y la seguridad son contrarias, pero en realidad productividad y seguridad pueden conjuntarse perfectamente de manera simultánea.

Usualmente, los presupuestos de los proyectos de obra reducen la inversión en seguridad, habiendo una mayor exposición a riesgos y daños a largo plazo que supondrán un incremento en los costes planificados.

El personal y el equipamiento en seguridad son esenciales. La falta de los equipos de protección necesarios puede incrementar notablemente los accidentes de trabajo. Esto incluye Equipos de Protección Individual (EPI), barreras de seguridad y cualquier otro tipo de instalaciones que aseguren un entorno de trabajo protegido.

Los accidentes laborales suelen ocurrir cuando no se proporcionan EPIs a los trabajadores, cuando dichos EPIs no son utilizados adecuadamente y cuando los trabajadores no obedecen o ignoran las advertencias de seguridad.

La formación en seguridad y salud y la retribución para el equipo encargado de ella son imprescindibles, pues el factor humano es el aspecto más significativo de la prevención de accidentes.

La presión por ser productivos, la carga y el ritmo de trabajo, los horarios, la planificación, la fatiga y el burnout (o síndrome de estar quemado por el trabajo) son estresores destacados en el sector de la construcción.

Normalmente, los proyectos de obra hay mucha presión de trabajo debido a los retrasos en la planificación, lo que puede llevar a invertir un menor esfuerzo en seguridad laboral. El incremento del ritmo de trabajo aumentará a corto plazo la productividad y reducirá los retrasos, pero tendrá efectos colaterales materializados en forma de accidentes laborales.

Las prisas suelen ser uno de los motivos más destacados en este entorno y el estrés continuado incrementará la fatiga y deteriorará la condición física y psicológica de los trabajadores, siendo más probable la aparición de accidentes.

La mayoría de los proyectos de construcción tienen lugar en entornos altamente cambiantes y en constante evolución, por tanto, son situaciones con alta exposición a riesgos laborales y con condiciones de seguridad variables.

Una manera de controlar las acciones inseguras específicas de los trabajadores es realizable mediante la eliminación de las condiciones de trabajo inseguras.

Pero mantener la seguridad en la construcción puede ser complicado debido a esa alta variabilidad, con lo que la aplicación de medidas de seguridad estandarizadas o las utilizadas en otros proyectos no siempre será viable, por lo que la adaptación es clave.

La cultura preventiva es la perspectiva corporativa existente acerca del valor de la seguridad y los comportamientos asociados a ella. El clima de seguridad es el retrato de la cultura de seguridad de la organización, el cual es dinámico por naturaleza, reflejando las percepciones y actitudes de los trabajadores de cada a las prácticas seguras.

Una mayor protección sin la mejora de la cultura preventiva no tiene por qué traer unos comportamientos más seguros. Debe crearse un clima seguro, haciendo incidencia en el papel del liderazgo capaz de fomentarlo mediante una comunicación cercana, con guía y supervisión.

Este es uno de los factores más importantes en la seguridad en el sector construcción. Aquí intervienen:

- Mandos inmediatos: comportamiento, actitud y efectividad.

- Trabajadores: comportamiento, actitud y control percibido.

- Participación en la seguridad laboral y feedback posterior.

- Responsabilidad, estado emocional, percepción del riesgo y cumplimiento de las normas.

En este punto juegan un papel relevante las condiciones de seguridad, pues influyen en la realización de actos inseguros por parte de los trabajadores y su actitud frente a ellos.

Es necesario no solo educar a los trabajadores para ser responsables de su seguridad, sino también para sentirse responsables de la seguridad de otras personas en la organización.

Las acciones de apoyo y reactivas por parte de los mandos inmediatos tienen un impacto directo en los comportamientos seguros del trabajador, así como la implementación de programas de participación activa en la seguridad.

La frecuencia y la gravedad de los accidentes ocurridos, el tipo de lesión, los fallecimientos, los primeros auxilios y las inspecciones posteriores ayudan a mejorar la efectividad de las acciones llevadas a cabo posteriormente.

Este aspecto también influirá en la actitud y los conocimientos de los trabajadores, y por tanto en sus potenciales comportamientos.

Aspectos como los beneficios de la empresa, costes, tamaño, clientes, subcontratas, tasa de abandono o reputación influyen en la seguridad de sus proyectos de construcción.

Una alta tasa de abandono, el bajo crecimiento de negocio (sobre todo en pequeñas empresas) o una gran cantidad de subcontratas se relaciona con una mayor cantidad de accidentes de trabajo.

En las pequeñas empresas puede haber menores habilidades de gestión y menor capacidad de implementación de medidas preventivas relacionadas con la concienciación y el cumplimiento. En este tipo de empresas influyen mucho además los valores de cada trabajador en relación con la seguridad.

Cualquier protocolo relacionado con la salud ocupacional, incluyendo las reuniones periódicas en las que se discuten dichas temáticas, conforman un entorno que apoya la seguridad laboral.

Un sistema de gestión sólido asegura la operatividad de las actividades a realizar y disminuye de manera directa los accidentes de trabajo.

Este compromiso organizacional de cara a la seguridad no solo sirve para dar ejemplo hacia los empleados, sino que además puede ser considerado como uno de los factores más importantes desde la perspectiva del trabajador.

Al fin y al cabo, un día a día seguro en una obra de construcción no está determinado únicamente por la gestión de los proyectos, sino también por la interacción entre todos los factores a todos los niveles jerárquicos.

Es necesario que las personas encargadas de liderar las distintas partes de estos proyectos se encarguen de fomentar y mejorar todos estos aspectos para conseguir una organización segura al completo.

Estudio: Factors influencing safety performance on construction projects: A review (2018). Safety Science, 109, 382–397. doi:10.1016/j.ssci.2018.06.017

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