El cuidado de la salud auditiva en el trabajo es vital, ya que la exposición prolongada a ruidos fuertes puede provocar pérdida de audición, tanto temporal como permanente, impactando la calidad de vida y el rendimiento laboral de los empleados.
¿Por qué usar protección auditiva?
Previene la pérdida auditiva permanente y es esencial para cumplir con las leyes laborales y así evitar sanciones. Al mismo tiempo promueve la seguridad laboral.
Incrementa la concentración y la productividad, ya que reduce el ruido excesivo, mejora la comunicación, lo que hace reducir los errores.
Mejora el bienestar general y reduce los problemas de salud mental al disminuir el estrés y la fatiga causados por el ruido constante.
Tipos de protección auditiva
Tenemos los protectores auditivos pasivos, que son los que dependen de su diseño y características físicas para proteger y al mismo tiempo tenemos los no pasivos, que son los EPIs que cuentan con sistemas electrónicos o mecánicos que provocan que se comporten acústicamente de una manera u otra. Como pasivos tenemos:
Tapones: Son pequeños y ligeros, se insertan en el canal auditivo y bloquear el ruido. Hechos de espuma (se comprime antes de insertarlo y se expande ya dentro), silicona (flexible, duradera y reutilizable) o cera (se ajusta y sella el oído adaptándose a él).
Hay versiones de un solo uso y reutilizables y sin o con cordón para llevarlos colgados en caso de estar usándolos de manera intermitente.
Ver todo el catálogo de tapones de oídos.
Orejeras: Cubren toda la oreja y sellan el área de alrededor. Equipadas con almohadillas acolchadas y suelen ser intercambiables para mayor comodidad.
Algunos modelos permiten ajustar la cantidad de sonido que se bloquea, lo cual es útil para situaciones que requieren comunicación. Además, la mayoría tienen una diadema ajustable que asegura un ajuste firme y cómodo para un uso prolongado.
Algunos dispositivos no pasivos pueden ser:
Comunicativos: Con micrófonos y altavoces integrados, facilitan la comunicación sin quitar la protección, esenciales en entornos con ruido constante.
Electrónicos: Amplifican sonidos seguros como alertas o conversaciones y reducen ruidos peligrosos. Permiten comunicación y protección simultáneamente.
Personalizados: Hechos a medida para cada trabajador, ofrecen un sellado perfecto y son cómodos para uso prolongado.
¿Cómo elegir correctamente tu protección auditiva?
- Evalúa el ruido del entorno, determina su naturaleza, intensidad y nivel de decibelios y que la clasificación sea la adecuada.
- Considera las preferencias personales de cada trabajador para fomentar el uso constante, ya sean tapones, orejeras u otro dispositivo.
- Elige el tipo adecuado según el nivel de ruido y las necesidades comunicativas.
- Correcto ajuste donde los tapones deben sellar bien el canal auditivo y las orejeras deben cubrir completamente las orejas.
- Capacita y haz seguimiento del uso correcto, estado y mantenimiento de los dispositivos.
- Asegúrate de que cumpla con las normativas, pruebas y controles de calidad.
Cómo mantener y almacenar tu protección auditiva
Mantenimiento: Lava los tapones reutilizables con agua y jabón y sécalos bien; desecha los de espuma después de cada uso. Limpia las orejeras con un paño húmedo y asegúrate de que queden secas. Revísalos para detectar desgaste o daños. Cambia las almohadillas de las orejeras cuando estén desgastadas y los tapones reutilizables cuando pierdan su ajuste o estén deteriorados.
Almacenaje: Guárdalos en un lugar limpio, seco y con temperatura controlada. Utiliza estuches específicos para mantener los protectores limpios y separados entre nuevos y usados. Mantenlos en un lugar de fácil acceso y etiquetados para una rápida identificación.
Adicionalmente se recomienda lavarse las manos antes de manipularlos para evitar contaminaciones. Forma a los trabajadores sobre lo comentado anteriormente y lleva un registro del mantenimiento y reemplazo para asegurar su buen estado y eficacia continua.
Conclusión sobre protección auditiva
La protección auditiva es vital para prevenir daños auditivos en entornos ruidosos. Elegir y mantener adecuadamente los dispositivos, junto con una capacitación adecuada, garantiza su eficacia.
Cumplir con las normativas de seguridad y fomentar la prevención protege la salud de los empleados, mejora la productividad y reduce el riesgo de accidentes. Invertir en protección auditiva es esencial para la seguridad y el bienestar de los trabajadores.
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